martes, 11 de noviembre de 2008

La mitad de la vida, Mariano Estrada


"La mitad de la vida"
.
La mitad de mis apegos son costumbres,
la mitad de mis quehaceres son rutinas,
la mitad de mis amigos son extraños
y quizá mi soledad es medio mía.

La mitad de lo que digo, vanagloria;
la mitad de lo que callo cobardía
la mitad de lo que sufro, masoquismo;
de lo que amo, la mitad egolatría.

Por mitad mis ilusiones, intereses.
Por mitad mis pensamientos, fantasías.
Por mitad mi libertad una mazmorra.
Mi verdad es media parte una mentira.

La mitad de mis miradas son pestañas,
dentadura la mitad de mis sonrisas.
La mitad de mis pisadas, pisotones
y el total de mis mitades, media vida.

Mariano Estrada
Del libro "Vientos de soledad"

4 comentarios:

Unknown dijo...

Esto es ser POETA...y no los sucedáneos...y cuántas verdades puede haber implícitas en ese poema; lo dicho, este es EL POETA y esta foto se supera a si misma, por ella misma y por el saber hacer, esperar la oportunidad, el momento de luz, de sombra, que se posen las gaviotas en la escollera, que se dibuje su perfil sobre el mar que este no esté demasiado agitado para que el reflejo de la luz sea casi perfecto, porque la naturaleza es imperfecta dentro de su equilibrio muy frágil, ...como no de su autora, Transi, la cual le gustaría que hubiera debate sobre sus artículos en el blog...pero con estos amaneceres lo tiene "muy crudo" , no hay otro debate posible que no sea admirar y agradecer que nos haga partícipes de estos espectáculos matutinos.

Transi Robles dijo...

El placer es mutuo!
Gracias por seguirme querido "admirador" y saber que le sacas jugo a este invento de compartir las mañanas... Ello me impulsa a seguir, a mejorar, a innovar para sorprender...
UN BSO!

Transi Robles dijo...

Por cierto, para el que no lo sepa, Mariano Estrada es un poeta que reside en La Vila Joiosa, pero que nació en un pueblo precioso de Zamora.

Transi Robles dijo...

Otra cosa el 11 del 11 es mi cumpleaños!
Gracias a todos los que me habeis felicitado...Sobre todo a Fernando que me sorprendió a la temprana hora de las siete y veinte de la mañana camino de mi "amanecer", por la calle, con la Xiki..., a punto de ver el mar..., ese su ansiado mar...