miércoles, 5 de enero de 2011

El mar...

Recuerdo del mar
.
¡Cómo te agitas bajo nubes grises,
lámina fina de metal de infancia!
¡Cómo tu rabia, corazón de niebla,
rompe la brida!
.
Cómo te miro con mis pobres ojos!
¡Qué imagen tuya la que inventa el sueño!
¡Qué lentamente te deshace el aire,
roto en pedazos!

Tú que guardabas en cristal salado
vivos retratos que ondulaba el viento;
tú que arrancabas en el alba fina
sones al alma,
.
tú que nutrías con tu amarga leche
sombras de playas, olvidados pasos,
ansia de ser sobre tu vientre verde,
locos piratas,
.
has ido ahogando temblorosamente
sombras que hundieron en tu paz sus ojos.
Hoy tu recuerdo, como lluvia fresca,
moja mi frente.

Si ahora volviera a recorrer tu orilla,
si ahora en tu cuerpo me volcara todo,
si ahora tu cuerpo le prestara al mío
frescos harapos,
.
si yo desnudo, si cansado, ahora,
más hijo tuyo, ahora, si el otoño
vuelto a mi lado me trajera el tibio
pan en el pico.
.
-lámina fina de metal de infancia-,
todo olvidado quedaría, todo:
látigos, cuerdas con que me azotabas,
vientos que mugen.

Todo sería nuevamente hermoso,
aunque tu garra me arañase el cuerpo,
aunque al tornar tuvieran tus mañanas
soles más negros.
.
José Hierro
De "Tierra sin nosotros", 1947


12 comentarios:

Trecce dijo...

Muy bonitas las fotos, Transi, muy conseguidas, magnífica la textura del agua y sus reflejos e impresionante el sol de la primera.

Transi Robles dijo...

Gracias Trecce, ese día parecía de veras una fina lámina de cristal salado...
Y el sol primero antes de esconderse entre negras nubes es espléndido. Dura muy poco, pero si eres puntual, algún día se te presenta así.
Gracias por apreciar esos instantes.
Un abrazo.

Segundo Sánchez dijo...

Maravilloso el poema de José Hierro, preciosas las fotos y no menos el tributo a Enrique Morente.
Comienzas fuerte este año.
Un abrazo.

Transi Robles dijo...

¡Cómo me gusta que te guste Valverde de Lucerna!
Qué bien volver tras este paréntesis y que me recibais con tanto afecto. Mil gracias.
Un abrazo.

Lito dijo...

Me gustan tus fotos con el mar siempre presente, los reflejos y esos colores rojizos por el sol. Ideales para acompañar a José Hierro.
Mucha paz y sosiego.
Un abrazo.

Xibeliuss dijo...

Qué mar más hermoso y qué luz para realzarlo. De José del Hierro y de Enrique Morente, poco más puedo decir.
Abrazos, Transi

Transi Robles dijo...

Gracias Lito, por tus palabras amables. Allí tendreis unos atardeceres hermosos... Y esas playas... que tan bien nos describes. (Y que estoy deseando conocer)
Salut i força!

Transi Robles dijo...

Hola Xibeliuss, sí que es hermoso este mar, tú te volverías loco buscando esta luz... (Aunque no sé..., me da que a ti te gustan más los bosques... Además se te da tan bien reflejar ese ambiente mágico)
Gracias y un abrazo.

El tejón dijo...

Me alegro de reencontrarte de nuevo,Transi, y más con esta preciosa entrada.
gracias por tu visita y el comentario que me dejaste en mi cueva de la que he estado unos días alejado.
Un abrazo.

marazulmalaga dijo...

transi...preciosas las palabras que nos regalas del mar... ufff el mar...
entre ellas, tus fotografias... esos brillos... colores...
te felicito por tu trabajo y sobre todo mi admiración para alguien que comparte el mar con tanta pasión...
un beso muy muy fuerte desde el mar azul...

Transi Robles dijo...

Hola Tejón!, qué gusto oirte y visitarte de nuevo.
Gracias siempre, por pasarte y saludar con tanto cariño. Ya te empezaba a echar de menos... (Yo tuve una pájara que me duro más de un mes...)
Pero aquí estoy, la verdad con ganas de hacer algún cambio (renovarse o morir). (Inicié este caminito sin saber muy bien hacia donde quería ir...)
365 besos, uno para cada amanecer del año!
(fotoamanece seguro que no desaparecerá)

Transi Robles dijo...

Mar azul de málaga..., qué placer y alegría recibir tu visita a esta otra parte de nuestro Mediterráneo.
Me enamoras; con tu mar, con tus retratos, con esas palabras, a veces desesperadas, otras seguras y llenas..., junto con esos 734 visibles que como yo te siguen... Pasar por tu casa es emocionarse con cada una de las estancias... Qué más decir... Que estoy rendida a ti, Maestro.
Un abrazote lleno de nuestra luz, esa que nos resulta tan imprescindible.